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Playa Pascual, tranquilidad y belleza.

Antes que nada, debo decir que en nada se parece hoy, Playa Pascual al recuerdo que de ella guardaba desde mi adolescencia, no se la ve tan agreste, pero sigue desbordando belleza y paz, sus aguas son claras y de un color ambarino.

Seguro que las fotos te dejarán una hermosa impresión en lugar de mis palabras.

Playa Pascual se encuentra el el Km. 35 de la Ruta 1 en San José, Uruguay.


Curiosidades de un paseo por la playa

No sé qué sería esto, aunque tenía un hermoso colorido.

Me encanta dar paseos por la playa y caminar buscando quién sabe qué tesoro. Estos son de gran valor para mí, en lo que respecta a su belleza y rareza.

Todo un tronco de la playa lleno de este tipo de valvas.

Un amiguito escurridizo.Excelente camuflaje.Agua viva le decimos aquí, pero mi cuñada insiste en que es agua mala. No estoy segura, en todo caso será una especie de medusa.


Recorriendo cercanías desconocidas…

Para el día de ayer, sábado 25 de noviembre de 2011, meteorología había pronosticado 32º, si bien no supimos si creerle o no, puesto que viene fallando bastante en los últimos tiempos, en fin con esta información decidimos ir al Río Santa Lucía en Canelones, Uruguay. A eso de las 08.30 hs. salimos rumbo a esa tranquila ciudad, pero a medida que avanzábamos más nublado se tornaba el cielo, ¡claro! que no nos desanimó en nuestra pequeña travesía, pero, llegamos a pensar que llovería. Así fue que, llegamos al parque que se encuentra frente a la estación de trenes, y recorrimos el lugar que por ser viernes relativamente temprano estaba bastante tranquilo, encontramos un lugar cerca de la cancha de Wanderers, junto a los juegos para niños, donde había bancos y mesas, allí desplegamos nuestro campamento.

Te cuento que estabamos cautivados por la pureza del aire y poder distinguir el canto de los pájaros en lugar de motores y tantos otros ruidos de la ciudad.

Mientras desayunábamos, se acercó un hombre de la ciudad de Durazno, que llevaba ya años viviendo en Montevideo, en ese momento estaba visitando Santa Lucía y vino a contagiarnos su enamoramiento, por un lugar que había descubierto más temprano en la mañana. ¡Qué increíble! no solemos ser desconfiados, pero nos costaba simplemente creer que sólo era esa su intención, mostrarnos las fotos que había sacado en el lugar e indicarnos cómo llegar. Me interesó la idea de conocer la Quinta Capurro, aunque quería volver a recorrer la zona agreste de la margen del río y tomar fotos para maravillarme una y otra vez.

Acostumbro decir que no me canso de buscar maravillas, pero en realidad no es así, puesto que físicamente me agota, tal vez porque no quiero parar, y siempre encuentro más y más cosas bellas en mi camino; sin embargo este es un tipo de cansancio que me descansa el alma, porque la llena de belleza y se desborda al punto de querer compartirla.

He aquí apenas una muestra del río y de la quinta, pero más tarde subiré en la categoría Lugares – Canelones, más fotos de estos hermosos sitios que tal vez te den ganas de visitar.


Esos cielos de las tardes…

La tarde puede ser, para muchos, la hora de volver de un paseo, de un viaje, del trabajo, de visitar a la familia, etc. De repente te encuentras pensando en llegar a casa, darte una ducha, cocinar, oír los mensajes en la contestadora, poner orden en algunas cosas, ver algún programa televisivo, etc. mientras los kilómetros avanzan y tu mente avanza también te das cuenta que a tu alrededor, en el auto, el tren o el bus, todo se tiñe de un tono ámbar; entonces al mirar la ventanilla, le haces un STOP a todo pensamiento, porque el cielo que estás viendo es espectacular y simplemente no quieres perderte como va cambiando a cada segundo de color.

No sé tú, pero yo (y no es la canción de Luis Miguel) dos por tres me encuentro en esta situación, y la disfruto y si tengo una cámara intento hacerla perdurar en el tiempo.


El Otoño siempre tiene su encanto…

Uruguay es un país que goza de cuatro marcadas estaciones, entre ellas el Otoño. Desde el 21 de marzo ha estado entre nosotros; sin embargo no ha sido sino hasta mediados del mes de mayo que ha mostrado su peculiar encanto, ese de los colores cálidos, enmarcados generalmente por un cielo gris pálido e indeciso.

Hoy caminé sobre las alfombras de colores que tendió a mi paso, las hallé de amarillo fuerte, también de un café claro, y me enamoró con el tinte rojizo que garabateó por el sendero entre los cedros.

El día estuvo frío, pero igualmente invitaba a disfrutarlo, por el parque la gente enroscada en bufandas, caminaba, corría, charlaba, disfrutando del encanto que suele traer consigo el Otoño.

En unos días más vestirá de gris cada árbol caduco que ya habrá perdido sus vestidos, y mostrará en la ciudad otro tipo de magia, que más allá de las quejas de algunos, no deja de ser una hermosa visión.